Sí. Lo se. Esto estaba tardando demasiado y alguien tenía que poner el grito en el cielo y denunciar esta atrocidad.
Y es que ya era hora de decir las cosas claras hombre...Que lo que no puede ser, no puede ser, y esto, no puede ser. Que la gente está muy mal de la cabeza no hace falta decirlo porque lo vemos continuamente, pero esto ya pasa de castaño oscuro y por la noche todos los gatos son pardos. Vamos, a lo que voy. hay gente que cuando pide una pizza, o la hace en su casa, da igual, se dedica a ponerle piña. Pero vamos a ver, ¿en qué clase de persona nos convertimos si le echamos piña a la pizza? ¿en portugueses? ¿en franceses? O peor aún ¿en francoportugueses?
Que hay gente a la que le guste la piña, pues puede ser, ellos sabrán lo que se meten en el cuerpo, pero ya echársela a una pizza, no hombre, va contra natura y debe ser denunciable, porque piña que cae en una pizza, pizza que queda infectada a lo Walking Dead. Y ES QUE ESTÁ MALA JOÉ, vamos a reconocerlo, las cosas como son, eso no hay quien se lo coma, pues nada, hay quien se empeña y pim pim, piña a las pizzas.
Cuanta gente extraña hay por ahí, la verdad, al final estoy viendo que paso de las pizzas y me voy a El Rinconcillo a jartarme de carrillá ibérica... ¡¡venga a ustedes!!
Ea, pues se acabó lo bueno, ya se ha acabado nuestra Semana Grande, y este año la lluvia no ha sido protagonista, aunque como somos como somos, nos gusta fijarnos en las cosas malas, y hay que reconocer que esta Semana Santa, nos deja varias estampas en este sentido.
Bueno que lo mismo no todos se fijan, pero yo si, porque a mi esto me gusta demasiado y no puede ser que se vea día tras días lo mismo. Y ojo, que en lo que a Hermandades y a pasos se refiere, no nos podemos quejar, que ha hecho una caló de mucho cuidado, literalmente, pero eso sí, yo prefiero que haga sol a que llueva, por descontado vamos.
Pero vamos, que no me liéis más y vamos al meollo del asunto. Señores, VAMOS A DEJAR LAS PUTAS SILLAS EN CASA POR FAVOR. De verdad, enserio, cuando un chino aparezca al lado vuestra en una bulla y os ofrezca una silla, decid que no por favor, porque esto ya se está volviendo un poco locura, como el que va a echar el día en Matalascañas o Chipiona, con la sillas, la nevera, la sandía, los filetes empanados, la abuela, el perro... NO, YA BASTA.
Nosotros que nos hemos caracterizado por saber movernos en las bullas, ahora no, ahora lo que sabemos es esperar SENTADOS a que entren los Panaderos o a San Gonzalo en el Baratillo.
Bueno, pues mejor no ha podido empezar esta Semana Santa 2014, y es que llevamos 100% de Cofradías que han podido realizar su estación de Penitencia, no ya desde el Domingo de Ramos, sino desde el Viernes de Dolores, qué maravilla...
El Domingo de Ramos amanecía con un color especial, había derbi y encima eso, Domingo de Ramos, no se le puede pedir más a la ciudad, ah bueno sí, que hiciera sol, y vaya si lo hizo. Rondando los treinta grados que estábamos, pero vamos, somos gente acostumbrada y mucho mejor esto que lluvia. Y mientras en el Benito Villamarían aún no se había terminado el partido, ya estaba la Cruz de Guía de la Hermandad del Porvenir dando los primeros pasos hacia la carrera oficial. Y como esta, todas las del Domingo de Ramos, sin ninguna incidencia; algún retrasillo en Campana que hizo que me quedara delante del Misterio de la Amargura cerca de media hora (fite tú que problema), pero vamos, ná.
El Lunes exceptuando alguna que otra lipotimia y una levantá un tanto desafortunada de la Virgen de la Hermandad de San Pablo, todo perfecto, como anda este Hermandad por la Cuesta del Rosario con Tres Caídas detrás. Del Beso de Judas y Redención, ¿Qué vamos a decir? Si lo vi dos veces. Y San Gonzalo lo mismo, haciendo las delicias del respetable por allí por donde pasa.
Ayer igual, solano imperial en el cielo y calor, mucha calor, y todas las Hermandades a la Calle. Desde 2010 no había un Martes Santo así, y ganamos el Mundial, así que para este año lo vuelvo a ver muy claro, segunda estrella en el peshito. La nota fea de ayer fue que al parecer "la bofetá" salió antes de tiempo en Águilas en vez de en San Lorenzo. Y ya sin coñas, señores todos, vamos a relajarnos un poquito que estamos muy nerviosos y se nos va de las manos, vamos a disfrutar de nuestra Semana Santa y a dar una imagen al exterior de respeto entre unos y otros. Y vamos a dejar de una vez de comprar las putas sillas en los chinos porque vaya coñazo que son, en todas partes, ni que esto fuera un camping joé que es que... ifhsighsvns me enciendo con este tema.
Como veis, esta entrada está se ha hecho bastante deprisa, pero me sentía con ganas de comentar lo bien que de momento está saliendo todo, y que si Dios quiere, siga todo igual. Y a parte, que hoy es Miércoles Santo y he quedado a las dos y media y me parece a mi que ya voy tarde.
¡Que disfrutéis de nuestra Semana Grande y que siga como hasta ahora el tiempo.!
Sevilla son olores, y eso es así. Y más aún ahora, en Cuaresma, donde nuestra ciudad brilla en todo su esplendor sabedora de que se vestirá de gala para recibir su Semana Grande.
Y sí, lo reconozco, soy un enamorado de Sevilla, la defiendo de quienes la critican e intentan hacer daño y al mismo tiempo siento celos cuando no soy yo quien la piropea. Me enamora por su luz, su brillo, su ambiente, su gente, su forma de ser... su todo. Pero si hay algo en especial por lo que estoy prendido absolutamente de esta ciudad es de sus olores.
Pasear por sus calles a cualquier hora es estimulante, y vuelvo a reiterar lo de en estos días, porque ahora, en vísperas de la Semana Santa y con el mes de Abril ya avanzadete, no hay ni una sola vez que el olor del azahar de cualquier plaza no me saque una sonrisilla.
Pero no sólo de azahares y naranjos vive el hombre, que de incienso también, y es que los señores que los venden saben perfectamente como atraernos a sus puestos, ya sea en el Salvador, Tetuán, en la puerta del Valle, la Plaza del Pan... y es que es darte ese olorcillo y automáticamente pensar ¡eh! "Esto ya está aquí".
Y que decir de esos balcones llenos de macetas y la gofetá de hierbabuena y albahaca que de ellos se desprende, una delicia vamos; o ese olor a algodón de azúcar del puesto de Puerta Jerez o el de garrapiñada de en frente del Cristina, al laito de la Torre del Oro. Son de esos olores que te transportan atrás, a una época lejana, pero que siempre han estado ahí y no puedes vivir sin ellos.
El culmen lo encontramos andando distraídamente por Tetuán, más concretamente a la altura de José de Velilla; del Blanco Cerrilo sale un olor que impregna a cualquiera que pase a cincuenta metros a la redonda, que se te mete dentro y no se quiere ir, un olor a adobo que quita to´ el sentío, y eso que sólo es olerlo, degustarlo es ya otra historia... lo bueno que está.
Yo sin estos olores no podría vivir, me faltaría algo, sin ellos Sevilla no sería Sevilla, al igual que esos olores sin Sevilla no serían lo mismo; y más si cabe, vuelvo a repetir, en estos días donde Sevilla brilla con luz propia.
Esperemos que este año la lluvia nos de un respiro, aunque parece algo complicado, y permita que salgan a la calle todas las Hermandades que llevan un año y como en el caso de varias, incluso más, esperando esta Semana con mucho trabajo, dedicación y devoción.
Son las 3:48 de este Viernes de Dolores que acaba de comenzar, se me empiezan a cerrar los ojillos y sin más me despido, sabedor de que sólo faltan varias horas para la Gloria.
Me parece que es la única serie que he visto desde principio a fin, así que me parece oportuno hablar sobre el final de "Como Conocí a Vuestra Madre". Si aún no lo has visto, no sigas leyendo porque sino te voy a espoilear de mu malas maneras, si ya lo has visto, te puede servir para ver si coincides con mi opinión y si no lo has visto y ni te gusta la serie pero estás leyendo esto porque te gusta mi blog, sencillamente, gracias, muchas gracias.
Bueno al lío. Después de colarnos dos temporadas de más como son la 7 y la 8, en la 9, aparece por fin la madre interactuando con los protagonistas. Una madre que la primera impresión que da es que más fea que un choco recién pescao. Con el paso de los capítulos, esta opinión va variando y empieza a parecer hasta mona. Llegando a los capítulos finales de la temporada 9, la madre me tiene ganado, al espectador le gusta como lo que es, la mujer de Ted.
Es en este momento cuando la serie decide terminar, de una manera rápida y violenta, reitero, después de colarnos dos temporadas de auténtica bazofia. Robin y Barney se casan felizmente y mu bonito tó. Ted se iba a vivir a Chicago y en la estación de tren, bajo un paragüas amarillo está la que será su esposa. Bien, aquí a los guionistas se les va la mano y empiezan a mostrar imágenes de lo que suceden año tras año después de la boda de Barney y Robin. Éstos se divorcian porque el trabajo de Robin hace muy complicada la conviviencia. Marshal y Lily van a por su tercer hijo y la mujer de Ted está embarazada de su primera hija.
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